Una de las cosas más duras de despedirnos del verano, es asumir que no todas las tardes podremos disfrutar de él. Los paseos no irán acompañados de su dulzura y gomosidad; mancharse ya no será un problema, el problema será encontrarlos. Con la bajada de las temperaturas, algunos helados se desvanecen y otros simplemente desaparecen, encontrar una cafetería donde los mantengan es una tarea propia del estraperlo.
Pero en esta vida siempre hay un plan B, que en este caso es más que divertido. ¡Hazlo tú, amigo!
Ves a la cocina, ponte unos guantes y que la inspiración te coja cocinando.
Nota: estas recetas son para helado de vainilla, pero puedes alternar el sabor añadiendo chocolate, frutas, o lo que desees a la mezcla.
1- El método de la bolsa:
Este procedimiento es increíblemente sencillo y, además, muy divertido, por lo que es una opción ideal si quieres disfrutar de la cocina en familia. Necesitas:
– 1 taza de leche
– 2 cucharadas de azúcar
– 2 cucharadas de leche en polvo
– 1 cucharadita de extracto de vainilla
– ¾ de taza de sal
– 4 tazas de hielo triturado
Para comenzar, mezclamos en una bolsa hermética pequeña la leche normal y la leche en polvo, el azúcar, y el extracto de vainilla. En una bolsa hermética más grande colocaremos el hielo y la sal, y añadiremos nuestra bolsa pequeña, completamente sellada.
Sellamos la bolsa grande y la colocamos dentro de otra bolsa hermética (como una matrioshka), y ahora viene la mejor parte: agitamos y mezclamos la bolsa unos 5 minutos, hasta que el contenido empiece a tener la textura del helado. ¡Y listo!
2- El método de la jarra:
Usando una técnica similar a la de la receta anterior, pero esta vez con una jarra con tapa en lugar de las bolsas, obtendremos un helado cremoso y delicioso.
Ingredientes:
– 1 taza de leche
– 2 cucharadas de azúcar
– 1 cucharadita de extracto de vainilla
Mezcla todos los ingredientes en la jarra y dale una buena sacudida. Luego, mételo en el congelador. Cada media hora sácalo y vuelve a agitarlo vigorosamente, hasta que la consistencia sea la de un helado (aproximadamente 3 horas). Ahora solo queda buscar una cuchara y devorar tu creación.
3- El método de la leche condensada:
Apenas tres ingredientes se necesitan para elaborar este postre. Si tenéis los brazos cansados de tanto agitar, descansa; este helado prácticamente se hace solo.
Ingredientes:
– 200 ml de leche condensada
– 600 ml de crema
– 1 cucharadita de extracto de vainilla
Coloca todos los ingredientes en un bowl, y procede a mezclar con una batidora eléctrica hasta obtener una crema bastante espesa. Vierte el contenido del bowl en un recipiente, cúbrelo con plástico de cocina, y mételo en el congelador. Al cabo de unas pocas horas, tu helado estará listo.
El helado es uno de los postres favoritos para la mayoría de personas. Ya sea por lo refrescante que es, por su dulzura, o porque simplemente es una creación divina. ¡No renuncies a él en invierno! @TottoEspana