Septiembre ha llegado y con él las clases han vuelto a empezar. Pero este nuevo curso no lo afrontas solo, una compañera inseparable promete estar siempre contigo. Ella va a encargarse de que no te falte de nada, de que en cada situación tengas lo que necesitas, de que todo esté bien organizado para que lo encuentres cuando tengas que hacer uso de ello. Nos referimos, cómo no, ¡a tu mochila! La de siempre o la nueva, pero especial y única por ser la tuya.
Ahora, ¿qué no puede faltar en tu mochila este curso? Echa un ojo a esta lista. Si tienes los 10 elementos que contienes estarás preparado para cualquier cosa que pueda pasar el próximo lunes.
1. AGENDA. Para planificarse bien las semanas y no olvidarse nada lo mejor es llevar siempre una agenda escolar. Una liviana, ordenada por semanas y también con un planning mensual. Que tenga calendario y zona de exámenes y entrega de trabajos. Saber utilizar esta herramienta te hará el curso mucho más fácil. Colócala siempre en un bolsillo que te resulte a mano, así no te dará pereza sacarla siempre que tengas algo que apuntar.
2. ESTUCHE. Un buen estuche es vital para el estudiante pero no tiene por qué ser pesado. El estuche ideal incluye dos bolis azules y uno de otro color (mejor rojo o verde), tipex (mejor de barra para ahorrar espacio), un lápiz o portaminas, goma de borrar, subrayador (ideal el clásico amarillo fosforito), y una pequeña regla. Procura dejar siempre estos elementos en el estuche, así no perderás ninguno. Si te apetece puedes llevar un boli extra en el mismo bolsillo que la agenda. Así seguro que no te da pereza apuntar nada donde sea cuando sea.
3. CUADERNO, ARCHIVADOR O CARPETA. Tus apuntes necesitan un sitio para ser escritos. Depende de tus gustos y tu forma de escribir tienes varias opciones. Para los más despistados lo ideal es el cuaderno. El cuaderno tiene la ventaja de que siempre mantiene sus hojas unidas haciendo casi imposible que alguna se pierda, pero el inconveniente de que por asignatura probablemente tengas que llevar uno diferente. El archivador es una alternativa más ligera. En el podrás acumular tantas asignaturas como quieras relativamente ordenadas gracias a su sistema de anillas y separadores, aunque tendrás que estar atento para que ninguna hoja se traspapele. Otra opción es la carpeta, un clásico en el que todo folio tiene cabida y que se puede decorar como a uno le guste más. ¿No te decides? ¡Combina! Un cuaderno con un archivador, o un cuaderno con una carpeta pueden llegar a ser la pareja perfecta.
4. CARTERA. El dinero para el comedor, el pase para el autobús y el carné de identidad son tres cosas que tienes que guardar con cuidado. Perder cualquiera de ellas sería un fastidio. Una buena cartera con compartimentos para cada uno de estos elementos resultará fundamental.
5. REPRODUCTOR DE MÚSICA. ¿Sería posible vivir sin música? Para ir de casa al cole, al instituto o a la universidad y también para volver lo mejor es echar mano a tu reproductor de música. Ideal para el transporte público (metro, autobús o tren). ¡No olvides cargar la batería y las canciones antes de salir de casa!
6. CALCULADORA. Si tienes clase de matemáticas o de física incluye en tu bulto una calculadora. Depende de tu nivel necesitarás una sencillita que pueda sumar, multiplicar y poco más, o una más compleja en la que puedas incluir ecuaciones y fórmulas. A no ser que de verdad te haga falta quédate con la primera, es mucho más ligera.
7. PARAGUAS. El invierno se acerca inevitablemente y con el la lluvia. Para que no te pille desprevenido asegúrate de llevar un paraguas pequeñito en la mochila, que sea ligero y seque rápido.
8. GAFAS DE SOL. Si, ya sé que acabamos de decir que es importante llevar un paraguas, ¡pero también gafas de sol! Si por la mañana tienes un largo camino hasta tu centro de estudios te ayudarán a descansar, si por la tarde al salir de clase te fastidia la luminosidad del sol te permitirán ver con claridad. Las gafas de sol son un imprescindible, no ocupan nada y apenas pesan. No tienes excusa para no llevarlas en un bolsillo de tu mochila.
9. APERITIVO. En algún descanso entre clase y clase siempre viene bien recuperar energías. Procura llevar siempre un aperitivo o algo de comer y así podrás repostar cuanto lo necesites. Una pieza de fruta a media mañana es ideal, y algo de chocolate por la tarde seguro que no te hace mal. Si te apetece llevar algo más grande (un sándwich, un bocadillo) echa un ojo a estos portameriendas. De ahí seguro que no se escapa nada.
10. AGUA. Beber agua es cosa sana y un trago a tiempo puede espabilarte y ayudarte a resistir la clase más aburrida. Puedes llevar agua en tu mochila en una cantimplora ligera o directamente en un botellín de plástico. La primera pesa un poco más que la segunda pero es más chula y conserva fresco por más tiempo el líquido elemento. Si tienes espacio en el saco merece la pena.
Una vez que tengas todos los elementos esenciales en tu mochila, es importante saber cómo cuidar tu mochila durante el curso, especialmente si la estás usando intensivamente en casa.
Después de revisar las 10 cosas esenciales, considera seleccionar la mochila ideal según la edad para asegurar que los pequeños vayan cómodos y con una opción ergonómica que cuide su postura y evite daños. También es importante saber cómo elegir la mejor mochila en función de tus necesidades, para que no eches nada en falta en el día a día.
me ayudo mucho(●’◡’●)